No tienes nada en tu carrito, baby
De los complejos más comunes que tienen los hombres es el tamaño de su pene. No he realizado una encuesta todavía, pero estoy segura de que todos se lo han medido varias veces en su vida. Imagínate, la familia les metió en la cabeza desde chiquitos que eso era para todas las novias que iban a tener. Así que imagínate. Que se enteren que lo tiene chiquito es un mortal golpe al ego de muchos.
A eso súmale si es largo pero flaquito, doblao o cortito y gordito.
Pero hablemos claro de cuándo verdaderamente importa el tamaño del paquete.
Funciona igual que uno grande
Tener un miembro más largo o ancho no te abre un mundo de posibilidades, al menos no en términos de fertilidad, placer, deseo o performance. Contrario a lo que suelen pensar muchos, el tamaño del pene no tiene nada que ver con el poder para dar, azotar o recibir placer. Físicamente, el tenerlo varias pulgadas más grande, no va a aumentar o mejorar tu sensación de placer.
Grande y bobolón, pero chiquito y juguetón
La pornografía nos metió en la cabeza que un pene grande lo es todo. Por eso muchos piensan que con tenerlo grande satisfacen a cualquier mujer. Nada más pendejo que eso. El sexo implica mucho más que la penetración.
El hombre que lo tiene o piensa que lo tiene chiquito suele ser un poco más pleaser en la cama. Su posible inseguridad los lleva (agraciadamente para nosotras) a compensar el placer que creen que no pueden dar por la falta de pulgadas, con un buen foreplay. Se esmerán más que los demás y te quieren tener contentita siempre.
Tenerlo grande no siempre es bueno
El pene muy grande muchas veces no son muy cómodos. Me explico: hay penes grandes que duelen. Que casi te tumban la pared de útero y puede no ser muy placentero. Mucho menos si la vagina no está bien lubricada.
Ni hablar de las ganas de vomitar que pueden dar a la hora del sexo oral. Eso sí que es un challenge.
Y del sexo anal, bueno, lo dejo a su imaginación.
Pero lo peor: el chorro de hombres que van por la vida pensando que chichan cabrón solo porque lo tienen grande. El mete y saca no es suficiente, hay que saberlo usar.
El promedio es probablemente más pequeño de lo que piensas
La mayoría de los hombres sobreestiman el promedio en lo que respecta al tamaño, ya que están convencidos de que aquello que todos los demás guardan en sus bultos es algo mucho más robusto.
Pero hoy les traigo una dosis de realidad muy necesaria en estos casos: Estudios han mostrado que la longitud media del pene es de 3.5 pulgadas cuando está mongo y unas 5 pulgadas cuando está erecto.
La mayoría no lo tiene grande.
Cuando sí el tamaño es importante
Mira, la realidad es que a muchas mujeres el tamaño sí les importa. Aunque está comprobado que en las primeras dos pulgadas de la entrada de la vagina está el Punto G, algunas mujeres no sienten que las están penetrando. A veces hasta el uso de los dedos les causa más placer que el pene, dependiendo su tamaño.
Otras que, simplemente les excita ver un pene grande. Ver y sentir ese paquetón bien utilizado, es lo que quieren muchas. Porque si no lo sabías, hay penes hermosísimos.
En resumen
El tamaño del pene es más importante para el hombre que para la mujer. La mujer quiere, no importa el size, que la lleves al límite del placer haciendole lo que conoces que la hace venir.
Dale un buen uso.