No tienes nada en tu carrito, baby
Bueno, por más que le huyas es posible que termines dando el canto. Es casi inevitable. El sexo anal es de esas cosas que cuando uno era adolescente decía, ”üy fo, no hay break!”. Pero luego, mientras vas entrando en edad, comienzas a darle cabeza. Como que te comienza a llamar la atención y como que sí, pero como que no.
Quieres pero no te atreves, lo sé. Crecimos pensando que eso era solo one way o de gays. No lo es.
Que si duele, que si es un embarre... Todxs pensamos lo mismo y las inseguridades en un principio es parte de esto.
Así que lo mejor que puedes hacer es prepararte y educarte para que cuando digas ‘hoy es que es’, te lo disfrutes lo más posible.
Yo te diría que mientras más lo vayas practicando más te va a ir gustando. No quiero venderte sueños de que de la primera te va a encantar, porque es probable que no sea lo que esperas. Al igual que el sexo con penetración vaginal, ¿a quién le gustó de la primera?
Bueno, como sucede con cualquier otro acto sexual, el sexo anal requiere de preparación, así que te damos unos tips básicos para que te ayuden a prepararte y disfrutar de otro maravilloso boquete de nuestro cuerpo :)
1. Experimenta por tu cuenta.
¿Eres nuevx en el anal? Entonces te recomendamos probarlo solx primero. Tal como sucede con el sexo convencional, es muy importante que comiences a jugar con tu ano por tu cuent, para que vayas familiarizándose con las sensaciones.
Puedes usar tus dedos, unos dilatadores, anal plug o dildo, e introducirlos poco a poco para que así, puedas conocer tús límites. Así, poco a poco y con la práctica, se va sintiendo más cómodo. Es normal sentir incomodidad las primeras veces.
Por lo tanto, lo mejor que puedes hacer es practicar el juego anal en solitario. Y esto es doblemente beneficioso.
Tal como dice la sexóloga y presentadora del podcast Sex With Dr. Jess, Jessica O'Reilly, “antes de siquiera considerar poner algo en el trasero de otra persona, asegúrese de explorar tu propio trasero”.
2. Háblalo con tu pareja.
El sexo anal puede ser muy abrumador. Si bien es placentero, al principio podría no serlo. Entonces, es bien importante que discutan el plan a seguir y las consideraciones que deben tener y respetar.
Normalmente las parejas tienen más sexo de lo que verdaderamente hablan de sexo. Hablarlo (como todo en el sexo) puede hacer la diferencia entre una experiencia traumática o rica. Ambos deben saber y estar bien claros de los acuerdo.
Si alguno de los dos quiere parar, todo debe detenerse y no presionar a continuar. No solo puede que lastimes a tu pareja, si no que, la cosa no brega con nada forzado.
3. Cuida la higiene.
Muchas personas rechazan el sexo anal porque lo consideran antihigiénico y les desagrada la idea de tocar ‘esa parte’ de sus cuerpos. Pero esto también es parte de la desinformación.
Hay técnicas y tips de limpieza que se usan normalmente antes del sexo anal para hacer que la experiencia sea cómoda y placentera.
Pero debes recordar que, sea como sea, estarás introduciendo algo en tu fondillo, así que puedes esperar que algo no salga como lo planeabas y el acto sea un poco menos limpio de lo que pensabas.
It is what it is!
Además del agua y jabón o las toallitas para bebés, por ejemplo, hay enemas para limpiezas más profundas y completas. También puedes poner toallas sobre la cama o cualquier superficie en la que estén por si el juego anal ensucia un poco.
En ningún momento...léeme bien… en ningún momento permitas que, luego de que el pene tenga contacto con tu ano o recto se le acerque a tu vulva. Esto puede provocar múltiples infecciones vaginales.
4. Con condón, por favor.
Siempre, siempre recomendamos tener sexo con condón. Y es que, además de proteger de infecciones de transmisión sexual, también protege de las bacterias asociadas a las heces fecales. O sea, la caca.
Y, según mencionamos en el punto anterior, si cambias de penetración anal a vaginal, usa un nuevo condón.
5. Una buena lubricación es un MUST!
Mire, eso tiene que estar bien lubricadito. Mientras más lubricado mejor. Si estás comenzando en esto, no intentes con saliva porque amigx, no la vas a pasar muy bien que digamos.
Si tienes dudas en saber cuál es el más recomendado para el sexo anal, puedes leer nuestra guía para escoger el lubricante que necesitas.
BONO:
6. No te trinques!
Mientras más te trinques, más cierras esa puerta trasera. Respira, fluye y disfrútalo.
Nota: estos consejos aplican para cualquier persona con trasero que quiera tener relaciones sexuales de este tipo ya sea con su pareja (independientemente de su identidad de género) o experimentar con cinturones u otros juguetes para la penetración.